Académicos cuestionan aporte de la salmonicultura en Magallanes

Premios nacionales de la región criticaron los impactos de las actividades económicas de la zona, entre ellas la industria salmonera. Recalcaron la necesidad de “replantear el futuro” de la región.

Como “susceptible a enfermedades, vulnerable al escape de peces y generadora de contaminación”. Así califica a la industria salmonera, en una declaración conjunta, un selecto grupo de académicos y científicos chilenos, unidos todos por dos características en común: ser premios nacionales y ser magallánicos.

La declaración, publicada este domingo por La Prensa Austral de Punta Arenas, es firmada por Sergio Baeriswyl (Urbanismo, 2014), Francisco Bozinovic (Ciencias, 2020), Nicolo Gligo (Medio Ambiente, 2001), Iván Jaksic (Historia, 2020), Fabián Jaksic (Ciencias, 2018), y Mateo Martinic (Historia, 2000). En ella, los académicos cuestionan el modelo “extractivo” de la región y plantean su tesis: “Magallanes se agota, se restringe, se contamina, se deteriora”.

Esta situación, según el diagnostico de los firmantes, se debe a la ganadería intensiva y la explotación del carbón, el petróleo y el mar. Pero también asignan responsabilidades a actividades nuevas como el turismo y la salmonicultura.

“Es cierto que aparecen nuevas posibilidades para el desarrollo de Magallanes, pero éstas se cimentan en la explotación primaria de los recursos naturales y sin prioridades claras sobre la retención de excedentes regionales y la creación de empleos”, expresan los premios nacionales, antes de calificar a la industria salmonera como “generadora de contaminación”. 

También se refieren al turismo como una actividad “de futuro incierto”, “porque no podemos fomentarlo masificándolo en forma descontrolada”.

Por lo tanto, en la misiva aseguran que existe la necesidad de “replantear el futuro” de la región: “Sólo así dará pie para analizar los condicionamientos y determinantes de lo que realmente hemos construido, y permitirá definir los caminos futuros hacia un desarrollo socialmente armónico y ambientalmente sustentable”, finaliza la declaración.