Pescadores artesanales piden avanzar en la prohibición de la pesca de arrastre de la merluza común

En seminario organizado por Oceana Chile, hombres y mujeres de mar se refirieron a los problemas que enfrenta el recurso y la necesidad de avanzar en la legislación que busca limitar esta práctica.

Con el fin de impulsar la discusión sobre la eliminación de la pesca de arrastre de fondo de la merluza común (Merluccius gayi gayi) y exponer la visión de la pesca artesanal de este recurso, la organización de conservación marina Oceana realizó el seminario “Pesca de arrastre de fondo: impactos en la pesca artesanal”, en el cual se dio cuenta de la necesidad de terminar con este arte de pesca para una de las pesquerías más importantes de Chile y que se encuentra en crisis desde al menos 2004. 

El encuentro contó con la participación de pescadores artesanales de Valparaíso y del Biobío, el diputado Jorge Brito, presidente de la Comisión de Pesca y Acuicultura de la Cámara de Diputadas y Diputados, y la directora ejecutiva de Oceana Chile, Liesbeth van der Meer. 

En la instancia, el diputado Brito, quien presentó en mayo de 2021 un proyecto de ley (boletín 14270-21) que limita la pesca de arrastre de fondo para la merluza común, señaló que es necesario avanzar en el resguardo de los ecosistemas y tomar medidas para rescatar la pesca artesanal, actividad que los propios pescadores afirman que está muy afectada. 

Carlos Coloma, armador artesanal de Caleta Cocholgüe (Biobío) afirmó: “Vemos un futuro oscuro para nuestra actividad porque desde hace varios años nuestro sustento, la merluza común, va desapareciendo”.

“Las embarcaciones se están perdiendo porque los recursos del mar no nos están dando para sobrevivir, el arrastre está haciendo un daño muy grande”, agregó. 

Una situación similar reconoció Maritza Cofré de la Caleta Sudamericana de Valparaíso: “El ecosistema ha cambiado, ya que el arrastre no deja nada, ha sido una mala práctica aquí en Chile, ha dejado un desierto en el fondo marino y con el pasar de los años la merluza se ha perdido, no hay grandes, solo pequeñas”.

Según el informe Estado de situación de las principales pesquerías chilenas, año 2020 de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura, la merluza común sigue en estado de sobreexplotación. 

Hoy el sector industrial —actualmente un solo barco arrastrero de forma permanente y un segundo de manera ocasional— concentra el 60 % de la cuota anual de merluza común, quedando el restante 40 % para 2193 botes y/o lanchas medias de pescadores artesanales. 

 “Toda la vida hemos tenido conflictos con la pesca de arrastre, vimos cómo con los años la captura iba mermando, mientras la industria aumentaba su capacidad de almacenar” recordó Omar Méndez, presidente del Sindicato de Pescadores Artesanales de Cocholgüe y miembro del Comité de Merluza Común.

“En nuestra caleta, la captura ya no da para subsistir y ya no hay nuevas generaciones de pescadores. La pesca artesanal no es la responsable de la crisis de la merluza común”, puntualizó el dirigente. 

Mientras que Eduardo Quiroz, pescador de Caleta Portales (Valparaíso) explicó que las redes de arrastre “son el arte de pesca menos selectivo que hay: arrasa con invertebrados, bentónicos y con todo a medida que sigue a la merluza”.

“Nosotros no estamos en contra de la pesca industrial —recalcó—, pero la red de arrastre no es compatible con la recuperación del recurso”.

Proyecto de ley

Actualmente, el proyecto que busca avanzar en la limitación de la pesca de arrastre de fondo para la captura de merluza común se encuentra en la Comisión de Pesca y Acuicultura de la Cámara Baja y debería ser pronto sometido a votación.

“La crisis de la merluza se evidencia desde hace muchos años y el arrastre sin duda ha generado impacto desde el punto de vista ambiental pero también social y económico para las comunidades de la pesca artesanal. Estos efectos, a veces invisibilizados, están ahí y marcan la vida de los pescadores y pescadoras”, afirmó César Astete, director de la campaña de pesquerías de Oceana Chile.   

Para evidenciar estos efectos y los impactos que tiene sobre los ecosistemas marinos se puso a disposición evidencia científica para los legisladores en un reporte elaborado por Oceana. 

“Esperamos que este proyecto siga avanzando en su discusión en el Congreso. Desde el punto de vista científico existen todos los antecedentes para avalar el término de la pesca de arrastre de fondo en la merluza común”, agregó la directora ejecutiva de Oceana Chile, Liesbeth van der Meer. “La evidencia nos muestra que, si este problema no lo atajamos a tiempo, la recuperación de la merluza será muy difícil”.